Sin duda, atrayente título: The Geographies of Beer. ¿Un nuevo tipo de cerveza? ¿O un mapa mundi con todas las cerveza del mundo?
Ninguna de las dos. El libro examina el impacto de la geografía en la tercera bebida más consumida del mundo, después del agua y el té (¿pensabais que la Coca-cola estaba en top 3?). Los más de 20 capítulo qeu forman el libro tratan de temas tan diversos como la geografía de la industria de la cerveza y de la comunicación social , la sostenibilidad y la difusión de cerveza de Europa, entre otros temas. Pero todos tiene en común en poner en relación la geografía y cerveza desde las perspectivas sociales, ambientales y regionales.
Esto enlace con una investigación personal que tenemos entre manos sobre la geografía de la producción científica. No nos referimos al análisis de la producción científica de forma agregada a nivel mundial o de países, sino a nivel individual de un investigador. Parecen dos conceptos totalmente opuestos sin ninguna relación aparente, tanto como geografía y cerveza, pero sorprende la información que surge cuando geografía y publicaciones científicas se analizan conjuntamente desde una óptica diferente.
martes, 29 de julio de 2014
miércoles, 16 de julio de 2014
#destacables #gis #libraries (16/07/2014)
Jeanine Scaramozzino, Russell White, Jeff Essic, Lee Ann Fullington, Himanshu Mistry, Amanda Henley, Miriam Olivares (2014). Map Room to Data and GIS Services: Five University Libraries Evolving to Meet Campus Needs and Changing Technologies. Journal of Maps and Geography Libraries, 10: 6-47
En la misma línea que el último destacable, este artículo describe cinco ejemplos de bibliotecas universitarias americanas que abrazan sin piedad, y con todos los beneficios que conlleva, los datos y las tecnologías geoespaciales. Solo me queda decir la envidia sana que produce este tipo de proyectos de éxito.
El primer beneficio inmediato que aporta el artículo es que aglutina cinco casos de uso de modelo de gestión de datos geográficos y usos de SIG en bibliotecas, con sus semejanzas y también diferencias debido a las particularidades de cada campus universitario. Las cinco bibliotecas universitarias analizadas son University of North Carolina at Chapel Hill, Texas A&M, New York University, North Carolina State University, y California Polytechnic State University. Luego cinco artículos en uno.
Otra contribución digna de mención es la capacidad de expansión que ofrecen los servicios y datos geográficos. Las bibliotecas mencionadas en el artículo han creado nuevos servicios y lazos con toda la comunidad universitaria a través de la gestión de datos geográficos. Este hecho posiciona a las bibliotecas más que nunca como un nodo central de los campus universitarios. Eso es, se trata de exportar el know-how de la biblioteca al resto de la comunidad universidad que cada vez demanda nuevos y variados servicios con relación a los datos geográficos.
También vale la pena mencionar que todas las bibliotecas universitarias del artículo tienen plantilla dedicada para la gestión de datos geográficos y GIS. La cantidad de personal varía entre universidades, pero en el caso de la Universidad de Nueva York (privada) la cifra alcanza las 8 personas especializadas en estas tareas dentro de la biblioteca para cubrir las necesidad de 50.000 personas entre estudiantes, profesores y personal de administración y servicios.
Finalmente, como corolario de las experiencias descritas en el artículo, la gestión de datos y de servicios geográficos es la antesala para dar el siguiente salto lógico a los servicios de gestión de recursos de investigación por parte de las bibliotecas. Es decir, los servicios de datos geográficos no son ni tiempo ni recursos desperdiciados, sino que estas universidades ya se están beneficiando de la experiencia obtenida durante los pasados años de la puesta en marcha de servicios SIG a nivel de campus para ir incorporando de forma más eficiente y efectiva nuevos pero similares servicios para cubrir las necesidades de proyectos y procesos de investigación.
La lectura del artículo es recomendable para todo responsable de centro de documentación y biblioteca universitaria que quiera mirar hacia el futuro con nuevos ojos, que quiera conocer las oportunidades, experiencias de primera mano y beneficios que reportan los servicios geográficos a las bibliotecas, y en definitiva, que quiera despejar dudas sobre si debe o no dar ese paso (casi inevitable) en el futuro. Mucho que ganar, muy poco que perder.
El primer beneficio inmediato que aporta el artículo es que aglutina cinco casos de uso de modelo de gestión de datos geográficos y usos de SIG en bibliotecas, con sus semejanzas y también diferencias debido a las particularidades de cada campus universitario. Las cinco bibliotecas universitarias analizadas son University of North Carolina at Chapel Hill, Texas A&M, New York University, North Carolina State University, y California Polytechnic State University. Luego cinco artículos en uno.
Otra contribución digna de mención es la capacidad de expansión que ofrecen los servicios y datos geográficos. Las bibliotecas mencionadas en el artículo han creado nuevos servicios y lazos con toda la comunidad universitaria a través de la gestión de datos geográficos. Este hecho posiciona a las bibliotecas más que nunca como un nodo central de los campus universitarios. Eso es, se trata de exportar el know-how de la biblioteca al resto de la comunidad universidad que cada vez demanda nuevos y variados servicios con relación a los datos geográficos.
También vale la pena mencionar que todas las bibliotecas universitarias del artículo tienen plantilla dedicada para la gestión de datos geográficos y GIS. La cantidad de personal varía entre universidades, pero en el caso de la Universidad de Nueva York (privada) la cifra alcanza las 8 personas especializadas en estas tareas dentro de la biblioteca para cubrir las necesidad de 50.000 personas entre estudiantes, profesores y personal de administración y servicios.
Finalmente, como corolario de las experiencias descritas en el artículo, la gestión de datos y de servicios geográficos es la antesala para dar el siguiente salto lógico a los servicios de gestión de recursos de investigación por parte de las bibliotecas. Es decir, los servicios de datos geográficos no son ni tiempo ni recursos desperdiciados, sino que estas universidades ya se están beneficiando de la experiencia obtenida durante los pasados años de la puesta en marcha de servicios SIG a nivel de campus para ir incorporando de forma más eficiente y efectiva nuevos pero similares servicios para cubrir las necesidades de proyectos y procesos de investigación.
La lectura del artículo es recomendable para todo responsable de centro de documentación y biblioteca universitaria que quiera mirar hacia el futuro con nuevos ojos, que quiera conocer las oportunidades, experiencias de primera mano y beneficios que reportan los servicios geográficos a las bibliotecas, y en definitiva, que quiera despejar dudas sobre si debe o no dar ese paso (casi inevitable) en el futuro. Mucho que ganar, muy poco que perder.
lunes, 14 de julio de 2014
Predicciones crowdsourcing para CyT
Hace un tiempo
que se viene oyendo el termino Inteligencia Colectiva y de la capacidad de predicción
de las masas. El documental "The code: the wisdom of the crowd" explica algunos ejemplos. El siguiente me
resultó curioso: si muestras una jarra con bolas de colores a diferentes
personas y les dices que estimen cuantas bolas hay, pueden responderte desde 70
bolas hasta 7000. Pocos encuestados de forma individual se aproximan al número
real de bolas. Sin embargo, cuando sacamos la media de todas las respuesta
obtenidas, sorprendentemente el resultado se aproxima muchísimo al número real
de bolas.
Sobre la
necesidad de incorporar conocimiento interno y externo también llevamos tiempo apuntándolo
en Inteligencia Competitiva.
El conocimiento distribuido dentro de la organización debe incorporarse a los
procesos de Inteligencia, a la vez que conocimientos externos, a través de Open innovation o crowdsourcing, deben formar parte de los tradicionales procesos de
Inteligencia Competitiva.
Un paso más allá iría
SciCast: a crowdsourced forecasting
platform for Science and Technology (https://scicast.org/#!), o sea una
plataforma colaborativa de predicción para la Ciencia y la Tecnología. Este
proyecto de investigación estadounidense se basa en lo que acabamos de
explicar: la mejor capacidad de predicción de un grupo de personas que de un único
experto, y pretende explorar y demostrar este hecho.
Los usuarios se
dan de alta en el sistema y realizan predicciones sobre cuestiones planteadas
por ellos o sobre otras cuestiones ya presentes en la plataforma. Estas
predicciones pueden ser modificadas en el tiempo, de modo que podemos ver en
tiempo real qué piensan los participantes que va a suceder sobre un determinado
hecho. El sistema también puede crear conexiones entre diferentes cuestiones
relacionadas y modificar consecuentemente las predicciones. Según la web del
proyecto, la técnica utilizada por debajo es la misma que se utiliza en grandes
corporaciones y gobiernos para entender la probabilidad de cumplir con las
métricas clave de rendimiento, cuantificar los riesgos que pueden poner en
peligro las operaciones, y comprender mejor las tendencias del sector.
Para rematarlo,
han puesto algo de gamificación en la participación y ofrecen recompensas a los
que más participen y más acierten. En la actualidad están buscando más participantes,
a ser posible en universidades y sociedades profesionales, porque, como ya
sabemos, cuantos más participantes más posibilidades tenemos de que nuestra predicción
se ajuste a la realidad.
Ante este tipo de
iniciativas, que parecen funcionar y acertar bastante, aunque su lógica esté realmente fuera de mi
capacidad de entendimiento... como siempre, me pregunto: ¿Qué lugar ocupan las técnicas
y la disciplina tradicionales de Inteligencia competitiva? ¿Dónde encuentra cada
uno su sitio?
domingo, 13 de julio de 2014
Un paso más en Citizen Science
Se habla mucho estos días sobre iniciativas Citizen Science, es decir, en hacer partícipes a los ciudadanos en cualquiera de las fases que cubre un proyectos científico y por ende, en la ciencia en general. Las fases de las que hablo son por ejemplo recolección de datos, análisis de datos, discusión de resultados, y diseminación de resultados.
En cuanto a la diseminación de resultados, me he tropezado con la revista Frontiers in Neuroscience for Your Minds. Da un aire fresco y novedoso en cuanto que los niños y adolescentes no son los que escriben los artículos a la revista, sino que actúan de revisores tutelados por un científico en esta ardua tarea de revisar un artículo científico (mirad extracto de la revista bajo). Realmente un paso atrevido en esto de involucrar a los jóvenes en la ciencia y en el proceso científico.
En cuanto a la diseminación de resultados, me he tropezado con la revista Frontiers in Neuroscience for Your Minds. Da un aire fresco y novedoso en cuanto que los niños y adolescentes no son los que escriben los artículos a la revista, sino que actúan de revisores tutelados por un científico en esta ardua tarea de revisar un artículo científico (mirad extracto de la revista bajo). Realmente un paso atrevido en esto de involucrar a los jóvenes en la ciencia y en el proceso científico.
Frontiers in Neuroscience for Young Minds is a scientific journal that includes young people (from 8 to 15) in the review of articles. This has the double benefit of bringing kids into the world of scientific research – many of them for the first time – and offering active scientists a platform for reaching out to the broadest of all publics.
jueves, 3 de julio de 2014
y go-drone voló
Hace unos meses os contábamos nuestra primera experiencia como micro-mecenas. Nuestra aportación fue bastante modesta pero go-drone voló, y bien alto. Nos entusiasma que un grupo de chavales tengan la valentía de emprender este tipo de actividades tecno-científicas. Con una buen tutor que les trace el camino, pueden conseguir muchas cosas que ni se imaginaban que pudieran conseguir.
Para empezar, me los imagino el día que obtuvieron la respuesta de Goteo de que su proyecto había alcanzado el mínimo económico para recibir la subvención. Me los imagino hablando entre ellos, buscando en Internet, hablando con cualquier persona de su entorno que supiera sobre el asunto de construir drones. Me los imagino en horas bajas también.
Me los imagino realmente motivados. Y creo que la motivación es la esencia para conseguir cualquier reto. Sobre todo la motivación cuando viene de dentro de uno mismo, cuando uno realmente desea y quiere hacer algo por todos los medios. Algo bastante distinto a la motivación externa: cuando se hacen cosas sin motivación personal, sino impuestas por alguien o algo.
Me los imagino escribiendo la memoria. Por cierto, un documento de gran valor especialmente para alguien interesado en el montaje paso a paso de un drone. Eso es pura ciencia reproducible. Me los imagino consultando fuentes y bibliografía. Me los imagino escribiendo el día a día de go-drone en las redes sociales y en la bitácora del proyecto. Me los imagino adquiriendo pensamiento científico, haciéndose preguntas sin parar, el valor de trabajo en grupo y también la disciplina necesaria para cumplir plazos.
Me imagino también la cara de sus padres y de su tutor.
Me los imagino volando junto a su drone. Me los imagino ahora mismo pensando ya en el siguiente reto. Que así sea chavales. Seguid motivados durante toda vuestra vida!
Un saludo.
Para empezar, me los imagino el día que obtuvieron la respuesta de Goteo de que su proyecto había alcanzado el mínimo económico para recibir la subvención. Me los imagino hablando entre ellos, buscando en Internet, hablando con cualquier persona de su entorno que supiera sobre el asunto de construir drones. Me los imagino en horas bajas también.
Me los imagino realmente motivados. Y creo que la motivación es la esencia para conseguir cualquier reto. Sobre todo la motivación cuando viene de dentro de uno mismo, cuando uno realmente desea y quiere hacer algo por todos los medios. Algo bastante distinto a la motivación externa: cuando se hacen cosas sin motivación personal, sino impuestas por alguien o algo.
Me los imagino escribiendo la memoria. Por cierto, un documento de gran valor especialmente para alguien interesado en el montaje paso a paso de un drone. Eso es pura ciencia reproducible. Me los imagino consultando fuentes y bibliografía. Me los imagino escribiendo el día a día de go-drone en las redes sociales y en la bitácora del proyecto. Me los imagino adquiriendo pensamiento científico, haciéndose preguntas sin parar, el valor de trabajo en grupo y también la disciplina necesaria para cumplir plazos.
Me imagino también la cara de sus padres y de su tutor.
Me los imagino volando junto a su drone. Me los imagino ahora mismo pensando ya en el siguiente reto. Que así sea chavales. Seguid motivados durante toda vuestra vida!
Un saludo.
martes, 1 de julio de 2014
Bibliotecas ubicuas, ¿dónde?
Las iniciativas
sociales de colaboración son cada vez más abundantes. No cabe duda que el
acceso a internet desde diferentes dispositivos, las mejoras en usabilidad, la alfabetización
tecnológica… y toda una serie de avances en relación con el uso de ICT por parte
de cualquier grupo social o individuo, han hecho proliferar estas iniciativas
en todas direcciones. Agrupados en torno a una temática de interés común el “poder
de las masas” permite darle la vuelta, mejorar, probar, cambiar, aportar,
reflexionar, renovar… el sistema establecido para refrescarlo.
En relación con
bibliotecas y el mundo del libro ha habido varias experiencias interesantes al
respecto. Uno de los primeros en aparecer fue el Bookcrossing (2001). Básicamente, la idea es la de “liberar” libros y dejarlos en lugares públicos
de forma que otro lector pueda encontrarlos y disfrutar de su lectura. Los
libros que se quieren compartir se dan de alta en una base de datos y se les
asigna un número de identificación (BCID) de forma que puedes seguir la vida de
los libros una vez que salen de tu estantería. También puedes “ir de caza” y
ver qué libros hay liberados en cada país, cada ciudad, cada barrio. La
iniciativa se ha extendido por todo el globo, por ejemplo en España cuenta con 42.391 miembros.
Recientemente me encontré
con una iniciativa experimental italiana interesante SocialBook: la rete delle biblioteche personali. En este caso la idea se basa en la creación de una biblioteca difusa, formada
por colecciones personales, entes locales y bibliotecas, que sirva de
aglutinador de una comunidad. Los usuarios (pequeños bibliotecarios) dan de
alta los libros que están dispuestos a prestar, generando así un catálogo, para
posteriormente poder localizar las copias de libros disponibles más cercanas a su domicilio, ejerciendo bibliotecas y otros entes, el papel de facilitadores.
Desde España, desde enero 2012 lleva funcionando la exitosa inciativa SocialBiblio, consistente en la creación de una comunidad a través de "una plataforma de formación colaborativa, en la que un día seremos profesores y otro seremos alumnos". La iniciativa, ampliamente difundida entre el colectivo profesional español, dió incluso el salto a Latinoamérica, estableciéndose diferentes webminars para ambos lados del océano, durante 2013.
Por último mencionaremos Viewshare aplicación web gratuita, desarrollada por la Library of Congress, a través de la cual los usuarios pueden desarrollar vistas dinámicas (mapas, nubes de etiquetas, líneas del tiempo, gráficas) partiendo de colecciones digitales.
Desde España, desde enero 2012 lleva funcionando la exitosa inciativa SocialBiblio, consistente en la creación de una comunidad a través de "una plataforma de formación colaborativa, en la que un día seremos profesores y otro seremos alumnos". La iniciativa, ampliamente difundida entre el colectivo profesional español, dió incluso el salto a Latinoamérica, estableciéndose diferentes webminars para ambos lados del océano, durante 2013.
Por último mencionaremos Viewshare aplicación web gratuita, desarrollada por la Library of Congress, a través de la cual los usuarios pueden desarrollar vistas dinámicas (mapas, nubes de etiquetas, líneas del tiempo, gráficas) partiendo de colecciones digitales.
Y qué veis de común
en todo estos, además de colecciones de libros analógicos o digitales?… geo… la
localización de los libros para ser cazados, la localización de los usuarios,
el seguimiento de los libros en su busca de la libertad… los usuarios están generando
sus propios mapas, indicando cuales son los puntos Bookcrossing en España, o fotografiando en qué lugar ha sido liberado un libro.
En el caso de
SocialBook también el territorio juega un papel muy importante. A escala más
reducida y por lo tanto a más nivel de detalle (sin entrar en temas de
privacidad), en este proyecto podrían representarse puntos culturales focales
en un territorio y aprovecharlos para la puesta en práctica de otras
actividades o servicios. En concreto esta iniciativa está enmarcada en el
proyecto Open Culture Atlas, de geolocalización cultural colaborativa, nacido en Italia en 2013.
Un complemento ideal para SocialBiblio, quizá sus promotoras ya lo hayan pensado, sería poder ver representados en un mapa el interés en determinados contenidos por determinadas zonas geográficas, o las áreas donde la iniciativa tiene más seguidores.
Un complemento ideal para SocialBiblio, quizá sus promotoras ya lo hayan pensado, sería poder ver representados en un mapa el interés en determinados contenidos por determinadas zonas geográficas, o las áreas donde la iniciativa tiene más seguidores.
Viewshare,
utiliza la visualización a través de mapas (y otras representaciones) como
forma de difusión y de localización de colecciones digitales.
Y ante esto, no
os parece que las bibliotecas deberían aprovechar el potencial geo? Conocéis otras
iniciativas que pongan en relación mapas y bibliotecas?
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